Muchas veces tiramos de tópicos a la hora de catalogar y describir a según que grupos, y el que esté libre de culpa, que tire la primera piedra. Pero a veces, estos tópicos funcionan. En los meses previos a la primera visita de los Me First a España, hemos podido leer la palabra fiesta en incontables ocasiones y es cierto que los Me First And The Gimme Gimmes han sido creados por y para eso: para la fiesta.
Pero tal vez porque yo ya los había visto anteriormente, tal vez porque era principio de gira o tal vez porque faltaba alguien de «peso» en la formación del grupo, el concierto del pasado jueves no me pareció nada del otro mundo. Si empezamos por el principio me veo más que obligado a pegar un tirón de orejas a la organización del mismo. Me parece totalmente incomprensible como, en la época de la información en la que vivimos, no hayan sido capaces de anunciar la baja de Fat Mike en este tour Europeo, y más si cabe cuando la promotora que monta los conciertos en este país no es la culpable de ese hecho. Pienso que alguien que paga un precio por una entrada tiene todo el derecho del mundo a saber que se va a encontrar al entrar al concierto. Recuerdo a dos chavales que, justo al empezar el concierto, se preguntaban el uno al otro de manera sorprendida por Fat Mike. Yo que estaba a su lado, opté por callarme y dejar que descubrieran por ellos mismos que esa noche no iban a verle.
Siguiendo con el término fiesta, he de decir que el concierto para mi si lo fue. Lo fue por la cantidad de amigos que pude ver y porque hay temas de los Me First que me encantan. Un concierto que empieza con «I Will Survive» y termina con «The End Of The Road» no puede nunca ser malo. El público estaba entregado y momentos como el de «All My Loving», donde en su estribillo se podía oir a la sala entonando un «naino-naino-na» en recuerdo a la, ya mítica, versión de Los Manolos, hace que sea cierto eso de que «Spain is different».
La voz de Spike sonó de manera perfecta, también hay que decir que se notaba que el grupo andaba poco rodado y que hubo más de un fallo. Todo se solucionaba con risas y bromas porque aquello era una «fiesta». La puesta en escena fue sosa y no tuvo nada que ver con los dos espectáculos que vi allá por el 2001 y 2003 en los Warped Tour de Virginia Beach. Y es que quizá sea eso, quizás Me First And The Gimme Gimmes son un grupo para festivales, donde son capaces de unir a fans de Nofx con fans de Metálica solo por el hecho de tararear esas enormes versiones archiconocidas, y donde la carga etílica es mayor aún si cabe.
Si echamos un vistazo al setlist, Jay Bentley (gimme circustancial) y los suyos tocaron clásicos como «Summertime», «Somewhere Over The Rainbow» o «Don’t Cry For Me Argentina» a los que unieron la gran «I Believe I Can Fly» 0 la mítica «Country Roads». Como curiosidad decir que Spike se atrevió con uno de sus covers en japones con un resultado genial!
Por último y para acabar, me gustaría dar un aviso de algo que lamentablemente se está empezando a repetir en conciertos de este tipo, y la presencia de personajes que aprovechan el todo vale de las primeras filas y las emociones de las mismas, para robar carteras y móviles. Parece ser que en esta ocasión alguno fue identificado aunque, obviamente, sin rastros de lo robado. De ahora en adelante vigilad vuestros bolsillos y si veis algo raro, haced como hacen ellos, aprovechad la energía del pit para darles su merecido. Yo lo haré.