Linoleum
Nuestras lonchas de queso favorito están de vuelta. Cuando parecía que habían llegado al límite de vidas y a su propio Game Over, una moneda de veinticinco pesetas apareció en un bolsillo roto de un pantalón olvidado y tienen para otra partida. Y vienen dispuestos a pasarse el juego.
Pulse Start nos traslada a esos años en los que no había otra preocupación que ir avanzando en las pantallas del juego de la vida y descubriendo nuevos jefes finales. «Iconoplasta» nos ayuda a aprender que nadie tiene la verdad absoluta, aunque esta sea autoproclamada. «PlayStation» y «Chica Gamer» sirven para demostrar que los frikis también tienen corazoncito y que el amor se puede mezclar con los videojuegos.
Siempre con un sonido cercano al punk pop más primitivo e inicial, Los Cheddars bien podrían haber tenido un hueco en los buenos años de Lookout! Records. Cómo buen grupo del género, usan el mismo como una herramienta necesaria para superar el mal de amores. «LP» es un claro ejemplo de prioridades. A Algunas y algunas es mejor no hacernos elegir entre amor o música. Por si acaso.
El Ep cierra con dos temas de lo más originales; «Misión a Marte» y «Un Concierto de Sugus». El primero una divertida crítica a lo que somos, a lo que nos hemos convertido, y a que (como especie), no nos querrían ni en Marte. El segundo, además de un precioso homenaje a sus (y nuestros) amados SUGUS, es otra historia de amor por la música y la vida. A ritmo de un tupatutupa que siempre será incitado a sonar «más rápido».
Conclusión: Estamos encantados de que Los Cheddars hayan pagado por tres vidas más. Esperamos que en Pulse Start sólo hayan gastado una y queden nuevos trabajos futuros. Si os gustan grupos como (los primeros) Green Day, Teenage Bottlerocket o los patrios Fast Food, este es vuestro juego.
