Linoleum
Como un seísmo. Así irrumpió Dogwood en mi vida. No, no fue con este Seismic (2003) sobre el que hoy escribo para celebrar su veinte aniversario. Fue con un tema que me llegó a través de un chat de IRC, «Preschool Days». Su velocidad y, sobretodo, la voz rota y rasgada de Josh Kemble me enamoraron.
El siguiente paso fue hacerme con, el que por aquel entonces era, su último lanzamiento, Building a Better Me (2000). Eso me confirmó lo que yo ya tenía claro; Dogwood iban a pasar a ser uno de mis grupos favoritos. Y aún a día de hoy, lo siguen siendo. Y también son uno de mis pocos debes en la lista de grupos que ver en directo. Una verdadera lástima.
Corría el año 2003 cuando supe que Dogwood tenían nuevo disco. En una época en la que descargaba discos online con más frecuencia con la que comía, me fue fácil hacerme con él. Lo pasé a mi MP3 portátil y al lío. «Selfish Americans» fue el primer corte que me impactó. Con un sonido potente, más sucio (pero a su vez más cuidado) que en sus anteriores trabajos. Luego llegó «Sunset are But Once A Day», un tupatutupa melódico y pegadizo.
Los medios tiempos también están presentes en este Seisimic, siendo «Absolution» uno de los mejores cortes de todo el álbum. Sin embargo, si me tengo que decantar por una canción de este disco, mi elección es «Your Tongue Is the Deadliest of Arrows». Inmensa y real como la vida misma.
Dogwood siempre han sido unos desconocidos para el gran público que, quizá amedrentado por la etiqueta de cristianos, ha dado la espalda a una banda que practica un punk rock excelso. Cierto es que la banda no reniega de sus creencias, y en todos sus discos presentan temas relacionados con la religión. En este caso, «Faith» es el corte más puro en ese sentido. Y, musicalmente hablando, todo un temazo.
Cada vez que tengo la oportunidad, recomiendo a Dogwood. Más de viente años haciéndolo y lo que me queda. Si no los conocíais, buscad este Seismic y escuchad «What Matters». Si sois capaces de permanecer quietas y quietos, os pago una ronda.
Nada sienta mejor que sumar años junto con aquellos discos a los que amas. Seismic es uno de mis fieles compañeros de vida. Y lo seguirá siendo hasta que se pueda. Gracias por tanto Dogwood.
