Los americanos Chaser están de vuelta. A principios de verano los de California lanzaron Small Victories, su quinto trabajo de estudio y su primer álbum en tres años. Un disco que no hace más que refrendar todas las palabras que ya dijimos en su día cuando los escuchamos por primera vez: Chaser son el presente del sonido melódico de la escena.
Con un concepto basado en la superación de esas pequeñas batallas por las que todas y todos pasamos diariamente, Chaser nos presenta un disco compuesto por trece cortes que son capaces de navegar con éxito entre la mayor de las tormentas. Con cortes más potentes y rabiosos como «Brand New Enemy», o «Out of the Shadows» la banda demuestra estar en forma y seguir siendo un auténtico metrónomo del punk rock más acelerado.
Dentro de este grupo de canciones espídicas, queremos detenernos en «Just Breath», un tema que bien podría haber tenido hueco en los primeros discos de unos Ignite rebosantes de actitud mental positiva. PMA que también encontramos en «Settle the Scores», y es que Chaser conciben la música como un vehículo conductor de emociones que une a los miembros del grupo con todo aquel que decide escucharlos, demostrando que estamos en esto todos juntos.
La velocidad sigue presente en más cortes, como por ejemplo en el encargado de dar título al álbum, «Small Victories», donde además de por el sonido, quizá en la línea «Unknown where this road will lead me» se esconda un guiño a Pennywise. ¿Quién sabe?. Sin embargo, Chaser también domina los tempos más pausados como en la inmensa «Flying High», o la emotiva «Stay Gold», dedicada a la memoria de su gran amigo Curtis Gold. Tampoco queremos olvidarnos de la pegadiza «The Breaks».
Chaser tienen claras sus influencias y lo que significan para la banda y su sonido. Y también para todos nosotros, que celebramos que en pleno 2024 aún haya grupos capaces de regalarnos un sonido propio de otro tiempo. Es por eso que al escuchar el último corte del disco, «A Revel Song», el que escribe no puede evitar cerrar los ojos e imaginar a Tony Sly tocando esta canción con No Use For a Name sobre un escenario. Gracias por este regalo, Chaser.
Conclusión: Lo llevamos diciendo tiempo, Chaser son los nuevos abanderados de un sonido que pensábamos muerto. Small Victories es, opuestamente a su título, una nueva victoria de una banda que ya empieza a llenar sus vitrinas de trofeos otorgados por crítica y fans. Y que son más que merecidos. Enhorabuena.