Las noticias desde el otro lado del charco, en lo que a ruido se refiere, siempre suelen venirnos del norte, lo cual reafirma a Occidente como una potencia de consumo que discrimina y nos impide ver «fácilmente» —que es como suele gustar— el carisma y el talento de cientos de bandas olvidadas fuera de su tierra. Pero no me voy a poner a soltar un discurso político y mediático sobre la industria (o no industria, que es el carácter DIY el que define al protagonista de este artículo) musical, que aquí he venido a hablar de mi libr…de un recopilatorio tan auténtico como indispensable.
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«Algunas Ideas Pueden Ser Peligrosas» (2012) reúne la fuerza y la rabia de catorce bandas latinoamericanas de distintos países: Brasil, México, Argentina, Perú, Chile y Guatemala son las tierras que vieron nacer y tronar a Nvblado, Per Se, Árboles en Llamas, Angkor Wat, Revolte y Old Friends, entre otros de los aquí protagonistas. La idea de crear este recopilatorio fue un trabajo en equipo y entre países, como me cuenta Juako, vocalista y guitarra por aquel entonces de Per Se: «[…] con un amigo que en ese entonces tocaba con la banda peruana Angkor Wat platicábamos acerca de nuestras bandas, de que nunca se había hecho un compilado de bandas latinas en el rollo de skram, emo, post-rock,… y que el hacerlo podría abrir una oportunidad de crear una «red» o una «comunidad» entre las diferentes bandas y escenas de Latinoamérica, ya que las distancias entre países dificultan mucho el poder viajar, tocar y conocernos». La idea pronto fue cogiendo forma y corpulencia, y tomando su nombre de la traducción al castellano del recopilatorio de bandas de emo-hardcore «Some Ideas Are Poisonous» (Ebullition Records, 1995), lanzaron esta bomba a la red siguiendo un modelo de trabajo colaborativo. «Cada uno por su parte le decía a bandas de su país o amigos de otros países […] y que al mismo tiempo ellos invitaran a más bandas, ver su respuesta y pensar que en realidad había mucho ruido bueno por escuchar y gente con quién platicar. Así que el compilado cumplió su cometido: se abrió una gran brecha, teníamos un grupo en Facebook donde cada banda subía sus nuevos temas o temas de otras bandas y donde ya se planeaba el segundo compilado, surgieron splits entre bandas del compilado. En fin, fue una idea que no resultó tan peligrosa», señala Juako.

Fue a través de este recopilatorio por el que descubrí las entrañas de las escenas ruidosas de estos países: que había chicha en Chile más allá de mis queridos Mártir y Abolición, y que tanto Revolte como Amanecer en Marte aportaban un toque de sensibilidad a la rabia de los anteriores (y propia, claro); me abrió las puertas a Ostende, Dana Fleyser y sobre todo Árboles en Llamas, bandazas argentinas para fans de la ausencia de pudor a la hora de gritar y romperse, de romper y gritarse; Carlton Banks, Walle y Per Se —desde México— sumándose estos últimos a mi lista de grupos de screamo con extra de violencia favoritos de todos los tiempos; Angkor Wat, con un hitazo de aúpa en este compilado y un sinfín de splits desde Perú, y Old Friends y su carisma en melodías más cercanas al post-todo y el hardcore clásico en algunos ritmos; y por último Nvblado y A Besta Deve Morrer, que no todo Brasil vive de samba y sus letras y melodías rasgan el vidrio como si fuera papel (en serio, especial atención a Nvblado y su tan denso como depresivo «Afogado», álbum que sacaron un año después del compilado).
Actualmente, y por desgracia, no todas las bandas de esta maravilla siguen activas, aunque en su momento fuera tremendo su impacto. Hablando con Juako, sale a relucir cómo cambió en parte su concepto de escena en aquel momento, una escena de la que muchos pensaban que estaba «olvidada o que era muy pequeña, y que resultó ser una gran escena ruidosa después del compilado […] surgieron muchas conexiones, la difusión era cada vez mayor, surgieron nuevas bandas,…y aunque el único obstáculo seguía siendo poder viajar a otros países para tocar, creo que en muchos países esta escena creció demasiado, y sigue haciéndolo».

Entre las bandas que siguieron y siguen dando caña, Árboles en Llamas tocan y presentan sin tregua su nuevo trabajo «San Expedito», que recientemente han editado en cassette a través del sello Percha. Nvblado hacen lo propio, acompañando su tremendo trabajo musical con una dedicación envidiable a la hora de hacer fundas para sus vinilos una a una y camisetas con plantilla (que viva la puro y lo casero siempre). Ostende empezaron a grabar nuevo material hace unas semanas, y aunque la última referencia discográfica de Revolte se remonta a 2014, la banda sigue en activo y tocando. Amanecer en Marte retomaron los ensayos este verano tras dos años de parón, y Carlton Banks participaron este año en el segundo volumen del recopilatorio «Bad Feelings Make Good Songs» del sello 20 Chords (México), a pesar de estar bien muertos. Otras bandas de este recopilatorio murieron de diversas enfermedades (A Besta Deve Morrer, con su nombre casi profético y Old Friends, que lo dejaron este mismo año, ya no producen pitidos tras sus shows), y algunas dejaron un legado a destacar, como es el caso de los fallecidos en combate Per Se, de los cuáles han nacido III y Fuerza Interior; Angkor Wat y su grandioso hijo/hermano Löri (al que tal vez recordéis por su split con Yusuke) o Walle, de los cuáles ha nacido una nueva ola de ruido psicodélico bautizada como xHendrix.
En serio, mirad más a menudo al otro lado del charco. Mirad y escuchad, que las venas de Latinoamérica llevan una sangre especial y distinta, ruidosa y hermana, con la que deberíamos compartir mucho más y de la que deberíamos beber.