Un lunes siempre es un día que arrastra muchos detractores. Hay quien odia los lunes porque significan la vuelta a una rutina odiosa de la que escaparían si pudieran, y es el fin de semana el respiro de espacio libre en el que son ellos mismos y pueden disponer del 100% de su tiempo para hacer lo que quieran, para ser quien quieran ser. Sin embargo si estas al loro, estos meses de antes de verano están llenos de pequeños momentos de esparcimiento repartidos independientemente del día de la semana, que te dejan volver a sentirte en tus zapatos hasta en un apestoso lunes.
Tanto es asi que este pasado lunes 5 de junio, había no una, sino dos jugosas citas en nuestro calendario. Exótica (NYC) + Troika en el Wharf 73 y Ivory Wave + Mortal Wombat + Grit (Dublín) donde siempre.
Dado que a día de hoy todavía no se ha inventado el desdoblamiento (o eso nos dicen) tuve que elegir a cuál de los dos dirigir mis pasos y sin darle demasiadas vueltas me decanté por inclinar la balanza hacia los invitados irlandeses.

Ivory Wave se subieron con ganas, sin prisa pero sin pausa, a defender su sonido d beat. A pesar de no tener aún bandcamp para haberles pegado una escucha antes, el cuarteto de hortaleza nos ayudaron a calentar motores y nos hicieron sentir que ya compensaba haber ido hasta allí. Genuinos y humildes, bromeaban entre ellos y con los que nutríamos el publico entre tema y tema y nos dejaron con una sonrisa en la boca y el buen rollo en el ambiente.

Los siguientes en subirse a empuñar sus instrumentos fueron los de Getafe. Nosotros ya hablamos aquí del EP que Mortal Wombat sacó a principios de año, Conspiranoid, y que fue, como no podía ser de otra manera, el eje central de su directo. Los 90, con ese sonido que nos transmite ilusión y promesas de juventud eterna, aparecieron en la sala. Solo faltaban pelos de pincho rubios oxigenados. Un gustazo disfrutar ese sonido refrescante, que invita a corear, pero cargado de acidez y una crítica disfrazada de sorna, si te paras a escuchar sus letras en ingles.
Para cerrar, la agrupación más numerosa de la noche. Grit se definen como Oi! En su bandcamp, pero aunque no es exactamente eso lo que escuchas si tuvieras que colgarles una etiqueta, lo que sí escucharía cualquiera es la calidad de lo que suena. De diferentes barrios de la capital Irlandesa, la conjunción de punk callejero con voz melódica femenina, aliñada con coros potentes (esos coros si eran Oi!) es una combinación que a mí me ya me gana, y no pude dejar de moverme el rato que duró el embrujo. Personalmente se me hizo muy corta la intervención de los invitados norteños, pero hay que entender que una gira por Europa desgasta hasta al más pintado como para estar haciendo directos de hora y media en cada escenario. Y que, al fin y al cabo, era lunes para todos.